Fantasía Gamer

Son unos cuántos los packs que se han ido añadiendo a Los Sims 4, para contribuir con nuevo contenido que mantenga al día al juego y, sobre todo, lo mejore poco a poco. Algunos pueden gustar más o menos, o aportar mecánicas más o menos necesarias, pero en general, tanto los packs de expansión, como los de contenido -los de accesorios tienen un objetivo distinto-, son variados y para todos los gustos. En el caso del que nos ocupa hoy, Papás y mamás -Parenthood en inglés-, pertenece a ese grupo de packs que, aunque no lo parezcan, son «necesarios».

Los Sims 4 han tenido que evolucionar mucho desde su lanzamiento para alcanzar ciertos niveles de calidad y de contenido que sus predecesores tenían de lanzamiento. Uno de estos elementos es la existencia de los infantes, que llegaron hace bien poquito dispuestos a revolucionar nuestras familias Sims con sus necesidades y su «adorabilidad». Pero su existencia, además, puso en relieve la falta de personalidad de niños y adolescentes que, en general, eran adultos más pequeños, con ciertas limitaciones y la obligación de ir a la escuela. Sin embargo, no había rebeldía en ellos, interacciones más personales -más allá de la de ayudarles a hacer los deberes-, algo que que gritase «soy un niño/adolescente, HAZME CASO». De hecho, los adolescentes pueden vivir perfectamente sin un adulto en casa, así que, ¿cuál es la gracia de tratar con ellos, más allá de conseguir que tu familia crezca? La finalidad del Pack de contenido Papás y Mamás es, precisamente, solucionar todas estas carencias.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que nadie nace sabiendo cómo ser un buen padre, incluidos los Sims. Es por esto que el pack de expansión añade una habilidad nueva, llama Aptitud Parental, que se desarrolla según vayamos educando a nuestros hijos a través de la interacción «Crianza de los hijos», hablando con otros padres o incluso buscando métodos para educar en internet. Según vayamos subiendo niveles, se desbloquearán nuevas interacciones, con las que podremos asegurarnos del bienestar de nuestros hijos, así como de que desarrollen una buena personalidad.

Porque algo muy importante que añade esta expansión son los valores: modales, responsabilidad, control emocional y resolución de conflictos. Las acciones que lleven a cabo niños y adolescentes, a disciplina que impongan los padres e incluso los consejos que estos den al colegio -de vez en cuando nos llamarán para avisarnos de algo que ha hecho nuestro hijo-, influirán en estos valores. Exceptuando cuando los padres incitan -u obligan- a sus hijos a hacer algo, una actitud que luego pueden reforzar, estas decisiones afectarán de forma positiva a uno de los valores, mientras que otro recibirá puntos negativos. De esta manera, conseguir un equilibrio o incluso que sean «perfectos» es realmente complicado, porque hay que estar atento a muchos factores del entorno y de nuestros sims. Es más, conseguir el máximo nivel -positivo o negativo- de los modales otorgarán un rasgo de personalidad definitivo, como responsable o emocionalmente inestable, que a la larga influirán en la manera de desenvolverse de los Sims.

Pero este pack de contenido no se reduce a la manera de interactuar de padres con hijos y la forma en que quieren educarlos, sino que se introducen elementos propios de la vida de un adolescente. Uno de los elementos más curiosos son las llamadas fases, que pasan tanto niños como adolescentes, y que condicionan su comportamiento durante unos días: pueden volverse mezquinos, por ejemplo, afectar a su estado de ánimo -que los lleva a caminar de las maneras más curiosas-, hacer que se pasen el día escuchando la música a todo volumen -lo que hace que los Sims adultos estén incómodos- y más cosas que hace que en ese periodo de tiempo interactuar con él sea algo complicado.

Además, vuelve algo que vimos por última vez en Los Sims 3, aunque no de la misma forma: el toque de queda. Si recordáis, en la anterior versión de Los Sims, los niños y adolescentes tenían que volver a casa a las nueve de la noche si no querían meterse en un buen lío -los podía detener la policía-. En este caso, son los padres los que establecen la hora del toque de queda -a las 19:00, 21:00 o 23:00- y los hijos los que pueden quejarse por él. Si se lo saltan, no son detenidos por la policía, sino que van perdiendo puntos de responsabilidad de manera continua hasta que entran de nuevo en el hogar. Y allí, los padres pueden actuar en consecuencia -o ignorar el suceso por completo-, bien gritándole, amonestándole, expresando su decepción e incluso con un castigo, como prohibir usar el móvil -que pueden utilizar a hurtadillas-, salir de casa o jugar a videojuegos.

Por otro lado, los niños y adolescentes, además de hacer deberes, de vez en cuando recibirán un proyecto de ciencias que deberán realizar en casa. Hacerlo con rapidez ganará puntos extra en el progreso académico, lo cual viene muy bien si queremos un hijo de sobresaliente. Además, como suele ocurrir en la vida real, los padres pueden colaborar en el proyecto, consiguiendo que sea un éxito en lugar de un peligroso fracaso si al niño le da por trabajar con descuido.

Los Sims 4: Papás y Mamás es uno de los mejores packs de contenido que se han lanzado hasta ahora, no sólo por la cantidad de novedades que añade al juego, sino también por cómo enriquece las interacciones entre padres e hijos y cómo estos ganan enteros en su personalidad. No sólo ayuda a que el juego sea [aún] más entretenido, sino que las historias que uno puede crear para sus Sims son más variadas. Algunos desearán, y con razón, que esto hubiese sido parte del juego original -algo que suele ocurrir con cierta frecuencia-, pero al menos, al ser un pack de contenido y no una expansión, su precio no es tan elevado.