Desde que empecé a escribir artículos teorizando sobre los misterios de la saga Dragon Age y su futuro, mi blog ha ido recibiendo bastante tráfico relacionado, especialmente a través de los motores de búsqueda. Ha pasado casi un año del primer artículo que publiqué al respecto, y las preguntas siguen siendo similares: gente que no ha terminado de comprender el final de Inquisition, que quiere saber si habrá otro título de la saga…

Muchas de las respuestas a estas preguntas se encuentran en los diversos artículos de teorías que he ido escribiendo sobre Dragon Age, pero en algunas ocasiones hay que tener buenos conocimientos del lore y leer entre líneas. Es por eso que he decidido crear este artículo de preguntas y respuestas, para esas personas que quieren comprender más en profundidad la saga, pero carecen de la información necesaria para ello, bien porque solo han jugado a Inquisition o porque no recuerdan todos los detalles. Todas las preguntas la he extraído de los términos de búsqueda recibidos por mi blog en 2015 y lo que llevamos de 2016. Por supuesto, aviso de que habrá spoilers.

¿Habrá otro Dragon Age después de Inquisition?

BioWare aún no ha hablado de un futuro juego de la saga, sus escasas menciones han sido a través de posibles, nunca dando nada por sentado. Incluso hicieron un vídeo de agradecimiento cuando sacaron el último DLC, supongo que más por el hecho de que Dragon Age 2 no tuvo una buena acogida que porque Inquisition sea el último título de la saga. Es más, aunque el final de este juego nos deja «con el culo torcido», es Trespasser el que nos hace las mayores revelaciones y nos emplaza a un futuro juego: se nos revela el origen del Velo que separa el mundo que sueña con el mundo despierto, la existencia de los dioses élficos, llamados Evanuris, los planes de Solas… Y nos emplaza a Tevinter. Además, hay que sumar que el DLC The Descent nos revela la verdadera naturaleza del lirio y de los enanos. Aún hay mucho que contar, sería extraño que BioWare dejase en este punto la saga sin plantearse hacer, al menos, otro juego más.

A pesar de que el nuevo Mass Effect se confirmó unos pocos meses después del lanzamiento del tercer juego de la trilogía original, desde entonces se han vuelto mucho más precavidos. Recordad que, durante toda la campaña de promoción de Dragon Age Inquisition, Mass Effect Andromeda casi ni se mencionó, sino que se esperó a que ya llevase el otro unos meses en el mercado para hacer la gran revelación… y poco más. Es muy posible que EA vaya a seguir la misma estrategia con un futuro Dragon Age, y no sepamos nada de él hasta que Mass Effect Andromeda esté en el mercado e, incluso, se haya anunciado la misteriosa nueva IP en la que BioWare está trabajando. ¿Mi apuesta? No sabremos nada hasta dentro de dos años -durante el primer trimestre de 2017 se lanzará ME Andromeda y al menos hasta el E3 2018, si es que sigue existiendo, no se revelará el próximo Dragon Age-. Quizá incluso tres. Pero estoy firmemente convencida de que, a pesar de los abandonos de BioWare, seguirán adelante. Aún tenemos a Patrick Weekes.

Extra: no existe una segunda parte de Dragon Age Inquisition, tan sólo los DLC Jaws of Hakkon (Las fauces de Hakkon), The Descent (El descenso) y Trespasser (Intruso).

Acabé Dragon Age Inquisition. ¿Puedo seguir jugando?

Dragon Age Inquisition es un juego de enormes posibilidades: hay muchísimos secretos, misiones secundarias y tres DLC que te ayudan a ampliar la experiencia una vez finalizada la historia principal. Puedes buscar los materiales necesarios para mejorar al máximo tus pociones, terminar de localizar los mosaicos, abrir el Templo Solasan, completar los logros… Además, Inquisition tiene un alto nivel de rejugabilidad, no solo por las decisiones que se nos presentan a lo largo de su historia, sino por la propia selección del personaje protagonista. Repetir la partida con diferentes protagonistas y decisiones permitirá tener una visión más amplia de lo que ha ocurrido en el juego, así como descubrir cosas que .hayan podido pasar desapercibidas.

Extra: los DLC The Descent y Jaws of Hakkon pueden jugarse en cualquier momento a partir de la llegada a Skyhold -si no me equivoco-. Solamente Trespasser está obligado a jugarse una vez terminada la trama principal de Inquisition, por motivos argumentales.

¿Qué significa el final de Dragon Age Inquisition?

Esta pregunta se puede referir a lo que ocurre con Corypheus o a la escena post-créditos. Como no lo tengo muy claro, hablaré de las dos situaciones:

Cuando derrotas en combate a Corypheus, se activa una cinemática en la que el Inquisidor abre una grieta en el Velo y traslada a nuestro adversario al más allá. Esta acción resulta un poco contradictoria, y aún, a veces, me cuesta de verdad comprender por qué decidieron hacerlo. Corypheus se ha pasado años planeando regresar a la Ciudad Negra para convertirse en dios -nos lo revela durante nuestro primero enfrentamiento: «beg that I succeed, for I have seen the throne of the gods, and it was empty«-, utilizando para ello un antiguo Orbe élfico -llamado Orbe de la Destrucción- que le permitiría rasgar el Velo si nuestro Inquisidor no se hubiera interpuesto en su camino. Por otro lado, Corypheus, que está infectado por la Ruina, utiliza la magia inherente en ella para sobrevivir: al igual que haría un Archidemonio, se traslada al cuerpo de alguien infectado, pero a diferencia del otro, en lugar de reencarnarse en un engendro tenebroso, lo hace en el de un Guarda Gris. Es decir, es inmortal, por lo que parece que la única manera de acabar con el peligro es encerrándolo muy lejos: en el más allá. Una vez hecho esto, se cierra la grieta, el orbe se destruye y Solas abandona la Inquisición.

Tras los créditos del juego aparece una misteriosa escena protagonizada por Solas y Flemeth. Me inclino a pensar que aquellos que no comprenden del todo este momento y sus implicaciones es porque no han jugado a Dragon Age Origins y Dragon Age 2 o bien porque no han profundizado demasiado en el lore de la saga. Como he dicho antes, por un lado tenemos a Flemeth transmitiendo algo al Eluvian -hablé de ello en profundidad aquí-, quien, además, es Mythal, una de las diosas del panteón élfico. Además, aparece Solas, quien se nos revela como Fen’Harel, otro dios de los elfos. Las implicaciones de esto son muy importantes, porque es la primera vez que tenemos confirmación de que una de las religiones de Thedas es cierta -recordemos que, además de los politeísmo de los dalishanos, tenemos la antigua religión de Tevinter con sus Old Gods, así como la Capilla y su Hacedor-. Además, descubrimos que el Orbe que habría permitido a Corypheus rasgar el Velo y acceder al más allá, pertenece en realidad a Solas.

Por otro lado, vemos como Solas/Fen’Harel asesina a Mythal y absorbe su poder -momento en el que le brillan los ojos- aunque no se nos revela con qué fin. Se puede intuir, especialmente después de jugar al DLC Trespasser, que es para recuperar parte de su antiguo poder y así poder llevar a cabo sus planes.

Extra: algunas personas se preguntan si es posible evitar que Solas se vaya o localizarlo después de que abandone la Inquisición. No es posible. La marcha de Solas es inevitable porque, de hecho, su participación en la labor de nuestra organización es casual: si su plan hubiera salido como quería, Corypheus habría muerto y, probablemente, Thedas también. Sólo nos acompañó para evitar que el antiguo Maese triunfara y, así, recuperar su orbe.

Tampoco se lo puede localizar. Lo máximo que se puede conseguir, antes de jugar a Trespasser, es intentar que Leliana encuentre información sobre su paradero. Entonces, el códice relacionado con este personaje se actualiza. Podéis leerlo aquí.

¿Cuáles son los planes de Solas?

Solas fue el causante de que Thedas sea tal y como lo conocemos, con un «velo» que separa el mundo real e inmutable del más allá, el mundo que sueña. Decidió crear el Velo para mantener a los otros dioses élficos, los Evanuris -que, en realidad, son sólo magos muy poderosos-, alejados de un mundo que terminarían destruyendo antes o después. Con lo que no contaba es que, con la creación de este manto que separa dos realidades, de destruyera el mundo como era originariamente: la magia desapareció de él y su naturaleza cambió. Sólo unos pocos afortunados mantenían la conexión con los poderes del más allá -los magos- y el resto se convirtieron en algo que, para Solas, apenas podían considerarse personas.

Solas, a diferencia de Mythal, no ha visto cómo los habitantes de Thedas se han esforzado por sobrevivir desde que aquello ocurrió. Durante buena parte de Inquisition, no comprende el valor de este mundo y de la gente que vive en él. Su única obsesión es conseguir que los elfos recuperen lo que han perdido, destruyendo el Velo que él mismo creó y devolviendo a Thedas a su estado original, independientemente de las miles de vidas que se pierdan con ello.

¿Por qué Solas te quita el brazo al final de Trespasser?

Desde que comenzamos a controlar a nuestro protagonista en Dragon Age Inquisition, somos conscientes de que la marca que lleva en su mano izquierda, el áncora, es algo doloroso. No en vano, casi acaba con su vida tras tocar el Orbe de la Destrucción. Durante el tiempo que dura nuestra misión contra Corypheus, y los dos años antes de que tenga lugar el Concilio Exaltado, la marca ha ido creciendo, haciéndose más poderosa y, por supuesto, mucho más dolorosa. Durante Trespasser, el Inquisidor sabe que no le queda demasiado tiempo, incluso sus antiguos compañeros se han dado cuenta del pésimo aspecto que tiene la mano del líder de la Inquisición.

Al final del DLC, cuando nos reunimos, por fin, con Solas, y nos cuenta toda la verdad sobre su historia y sus planes, finaliza con las siguientes palabras «la marca te matará antes o después. Viniendo hasta aquí me has dado la oportunidad de salvarte otra vez». A continuación ejecuta algún tipo de encantamiento o magia y el áncora va desapareciendo de la mano del protagonista. Sin embargo, poco después descubrimos que, además de la marca, el brazo ha sido eliminado. ¿Pero por qué?

La cuestión es que, en realidad, Solas no le ha quitado el brazo al Inquisidor, aunque en un primer momento, los jugadores pensamos que sí. Según parece, Patrick Weekes, cuando se le preguntó al respecto por Twitter, reveló que el brazo se encontraba en muy mal estado cuando el áncora desapareció, de manera que la única opción era amputarlo.

Este es un acontecimiento inevitable. Según revelaron durante la pasada GDC, la intención del DLC Trespasser era prepararnos para lo que pueda venir pero, sobre todo, cerrar definitivamente el arco argumental del Inquisidor. Y para ello, era necesario acabar con la fuente de su poder: el áncora. Personalmente, creo que quitarle el brazo fue un añadido dramático y, también, una forma de darnos a entender que nuestro protagonista ya no puede estar en la primera línea del frente.

¿Qué es y para qué sirve el Pozo de las Penas?

The Well of Sorrows, Vir’Abelasan o, simplemente, Pozo de las Penas, es un artefacto situado en el antiguo Templo de Mythal, que debemos proteger de Corypheus durante la misión «What Pride had Wrought» -Lo que ha traído el orgullo-. Según nos revela Abelas durante esta misión, el Pozo de las Penas contiene el conocimiento que depositaban aquellos elfos devotos a Mythal cuando se acercaba el final de sus días. Además, es un recuerdo de lo que se ha perdido tras el asesinato de esta diosa. Para obtener lo que se esconde en él, es necesario que alguien beba de sus aguas. En el juego puede ser tanto el Inquisidor como Morrigan.

¿Para qué sirve? Su utilidad, seguramente, va mucho más allá de lo que se nos presenta en el Dragon Age Inquisition, pero entraña un gran riesgo. Si nuestro protagonista es quien bebe del Pozo, automáticamente quedará sometido a la voluntad de Mythal -que poco después resulta ser muy real-, haciendo cualquier cosa que ella desee, seamos o no conscientes de ello. A cambio, podrá escuchar unas voces en su cabeza que le permitirán comprender textos escritos en élfico -si pertenece a otra raza o la información es muy antigua-, convocar y controlar al dragón guardián del Altar de Mythal, evitar enfrentarse a espíritus de elfos aliados con Fen’Harel durante el DLC Trespasser… Sin embargo, si bebe Morrigan -es la opción que siempre elijo-, ella podrá convertirse en Dragón y ayudarnos en nuestra lucha contra el falso Archidemonio de Corypheus. Todas las otras ventajas las perdemos, pero evitamos convertirnos en un esclavo de una diosa élfica. Por otro lado, me gustaría pensar que, dada la relación de Flemeth/Mythal con Morrigan, si bebe ella del Pozo, su historia y participación en futuros juegos será mucho más destacada.

¿Quién es Kieran y por qué es importante?

Se nos habla poco de este niño y, a la vez, se nos revela mucho de él. Kieran es hijo de Morrigan, concebido al final de Dragon Age Origins, noche antes de la batalla final, por uno de los Guardas Grises: el protagonista, Alistair o Loghain. Su creación tuvo un propósito: atrapar el alma del Old God que se ha convertido en Archidemonio, de Urthemiel incorrupto y, de paso, salvar la vida de aquel que aseste el golpe final. Es más, el hecho de que todo fue idea de Flemeth, y que en la misión El último acto revela que tiene planes para Kieran dice mucho de su peligrosidad e importancia.

Nunca pudimos verlo ni hablar con él hasta Dragon Age Inquistion, que es, además, el momento en que descubrimos que no tiene por qué ser algo más que un niño. Si ha sido el protagonista de Origins quien lo ha engendrado, cabe la posibilidad de que el ritual no saliera bien y el alma del Old God se destruyera. Si es cualquiera de los otros dos candidatos, siempre saldrá bien, y el potencial de Kieran, un niño de unos 10-11 años, será increíble.

En el poco tiempo que podemos hablar con él antes de que nos interrumpa Morrigan, nos hace unas increíbles revelaciones. Pero sólo si Kieran lleva dentro de sí el alma de un dios. Si no, sus respuestas son las propias de un niño.

Si el Inquisidor es humano:

-Pensé que serías más aterrador. Madre dijo que lo serías.
-¿Por qué diría tal cosa?
-Porque la gente teme la siguiente era si llega demasiado pronto.

Los acontecimientos que Inquisition y, especialmente, de Trespasser, están catapultando a Thedas al final de la Era del Dragón. Muchos cambios están por llegar, entre ellos, la posible caída del Velo y el regreso del mundo a su estado original.

-Pensé que serías más aterrador. Madre dijo que lo serías.
-Algunas personas piensan que soy lo más aterrador del mundo.
-Madre dice que también pensarían lo mismo de mí si supieran.

Claramente, que un niño tenga el alma de un antiguo dios en su cuerpo asustaría a cualquiera.

-¿Y quién es tu madre?
-Madre es la heredera, aquella que aguarda la próxima era.

Sus grandes conocimientos y su vida con Flemeth, probablemente, la han hecho consciente de que Thedas se encuentra al borde del precipicio del cambio. De hecho, aunque no es parte del juego en el trailer de presentación del E3 2013 dice «la oscuridad se acerca. ¿Te enfrentarás a ella? ¿O guiarás a este mundo a su amargo final?»

Si el Inquisidor es un elfo:

-Madre nunca me dijo que el Inquisidor fuera un elfo.
-No es algo tan terrible, ¿no?
-No, solo que no sé por qué tu gente quiere verse así.

En un principio me costó encontrar el sentido a estas palabras, pero al final descubrí a que se refería: el Vallaslin que el juego nos obliga a llevar -somos dalishanos en este caso, así que tiene sentido-. Tal y como nos revela Solas si tenemos un romance con él, o Corypheus en la batalla final, el tatuaje, en realidad, es un símbolo de esclavitud. Una forma de reconocer a qué Evanuri pertenece el elfo que lo lleva.

-Madre nunca me dijo que el Inquisidor fuera un elfo.
-Las orejas me delatan, ¿verdad?.
-No, tu sangre es muy antigua. Me di cuenta inmediatamente.

Los elfos son de las razas más antiguas de Thedas, quizá incluso la que más -no ha quedado claro en qué momento llegaron los enanos-. Son parte de él desde antes de la llegada de los humanos, antes de la creación del Velo, el momento en que Arlathan desapareció y el mundo cambiase para siempre. Que son antiguos es algo que puede decir cualquiera, pero la forma en que Kieran lo expresa lo hace diferente.

Si el Inquisidor es un qunari:

-Eres muy alto, madre no me dijo que fueras un qunari.
-¿Oh? Me han dicho que es lo primero que la gente percibe de mí.
-Yo percibí tu sangre. No pertenece a tu gente.

Este comentario, además del que realiza Corypheus al final del juego -«tu raza no es siquiera una raza, es un error»- ha movilizado a los fans de todo el mundo para investigar en profundidad qué significa y qué pasa entonces con los qunari. Si a eso le añadimos los comentarios de Iron Bull sobre si los qunari son un cruce con Dragones, tenemos una perfecta bomba de relojería y un misterio extra para revelar en otro juego.

-Eres muy alto, madre no me dijo que fueras un qunari.
-¿Oh? Me han dicho que es lo primero que la gente percibe de mí.
-Madre nota cosas muy extrañas de la gente.

De nuevo, volvemos a los conocimientos de Morrigan sobre el antiguo lore y lo que su crianza con Flemeth le ha aportado a la hora de comportarse y actuar.

-Eres muy alto, madre no me dijo que fueras un qunari.
-No es algo tan terrible, ¿verdad?
-No, solo lamento lo que le hicieron a tu gente.

No sabemos quién era la gente de qunari antes de que les hicieran lo que fuera. Las teorías, como ya os comenté aquí, es que esta raza fue creada por un motivo desconocido a través un ritual que con elfos y sangre de Dragón. Una de las posibilidades es que quisieran imitar a Mythal, que podía transformarse en esta criatura. De hecho, existe un códice que menciona algo así, y que solo puede leerse si se ha bebido del Pozo de las Penas. Esto es lo que dice: su crimen es alta traición. Tomó una forma reservada para los dioses y sus elegidos, y ha osado volar en una forma divina. El pecador pertenece a Dirthamen. Afirma que tomó alas a instancias de Ghilan’nain -creadora de criaturas- y ruega por la protección de Mythal. Ella no le ha mostrado su favor y dejará que Elgar’nan lo juzgue.

Si el Inquisidor es un enano:

-Eres muy bajo. Madre no me dijo que fueras un enano.
-¡Me has pillado! Y yo que estaba intentando ser más alto…
-Pero no puedes, no sin los Titanes.

Esta es la primera vez que se mencionó a los Titanes en Dragon Age, por lo que no sabíamos nada de ellos. Al final, el DLC The Descent nos reveló la verdad sobre ellos y su relación con los enanos. Incluso nos ayuda a comprender que Dagna conectó su mente con uno de ellos en cierto momento.

También hace algunos comentarios interesantes si el Inquisidor es mago, como que el lirio le da unas pesadillas terribles y que por eso no podría ser Templario -supongo que, más que pesadillas, son visiones-, o que no poder sentir la magia es como estar ciego.

Extra: la presencia de Kieran, aunque importante, es muy posible que no sea determinante en el futuro. El hecho de que su existencia esté determinada a las decisiones de los jugadores hace que su papel en Dragon Age tenga que limitarse a ser un secundario con no demasiada importancia.

¿Quién es Sandal?

Sandal es un personaje muy misterioso que ha aparecido junto con su padre, Bodhan, tanto en Dragon Age Origins como en Dragon Age 2. Su ausencia en Inquisition ha sido tomada con escepticismo por los fans, pues lo único que se sabe de él es un diario que aparece en la biblioteca Vir’Dithara durante el DLC Trespasser.

A primera vista, Sandal es un enano con ciertos problemas mentales bastante simpático. En los juegos en los que aparece se dedica, únicamente, a añadir encantamientos a nuestras armas con las runas que nosotros le proporcionamos, una tarea que, mientras otros tienen que estudiar intensamente durante años, para él es completamente natural.

Hasta aquí sería todo lo que podríamos decir de Sandal si no fuera por ciertos detalles que hace que su presencia parezca algo más importante de que pensábamos. A pesar de su comportamiento algo infantil y su único interés en las runas, es capaz de hacer frente y matar a una horda de engendros tenebrosos sin sufrir ni un rasguño. Durante Dragon Age 2 repite hazaña y, además, congela a un ogro. ¿Cómo? Según sus palabras: «not enchantment».

Como sabemos, los enanos no pueden hacer magia. Pero entonces, ¿cómo lo ha hecho? Es muy posible que Sandal sea, en realidad, uno de los elegidos de los Titanes, igual que Valta durante el DLC, El Descenso. A ella, por ejemplo, la vemos realizar un hechizo tras derrotar al final boss, por lo que no sería difícil imaginar que Sandal puede hacer algo similar.

Por otro lado, Sandal tiene visiones o premoniciones. En cierto momento en Dragon Age 2 nos revela los planes de Solas, un personaje que aún no conocíamos: One day the magic will come back. All of it. Everyone will be just like they were. The shadows will part, and the skies will open wide. When he rises, everyone will see.

Otras cuestiones

• En la misión Aquí yace el abismo, es obligatorio elegir entre Hawke o el Guarda Gris -Alistair, Loghain o Stroud-. No hay forma de salvarlos a los dos. No obstante, el hecho de que se nos diga que «uno de los dos podría morir», deja abierta la posibilidad de que consiga escapar del más allá por otra grieta.
• Al final de Dragon Age Inquisition, es posible que algunos personajes no aparezcan disponibles, como Cassandra, si ha sido elegida como la nueva Divina. Sin embargo, puede volver de nuevo a tu equipo si hablas con ella. Esta opción no es posible con Solas.
• Aunque a muchos les gustaría que fuera posible -a juzgar por la cantidad de veces que aparece en los términos de búsqueda de este blog-, el Inquisidor no puede convertirse en dios al final de Dragon Age Inquisition. Tampoco puede morir y convertirse en un mártir como el Guarda Gris en Dragon Age Origins.

¿Tenéis más preguntas? Dejadlas en los comentarios y las contestaré directamente o con un nuevo artículo.